12 Nov Mi primera acampada… ¡Chispas!
-Y... ¿Habrá fogata?- pregunta él, mirando al infinito.
-Si, claro- contesta ella ensoñada, imaginando las llamas reflejándose en sus ojos, acurrucados, uno junto al otro, en el frío del páramo.
-Pues yo no puedo... ¡Me da asma!-.